Aquellos maravillosos años en que acababas el instituto y tenías que decidir rápidamente qué carrera querías estudiar, a qué profesión te gustaría dedicarte, ¿los recordáis? Había gente tan perdida que no tenía nada claro. Normal, pídele tú a alguien con diecisiete años que piense en su futuro y la mayoría de estos adolescentes se pondrá blancos. Siempre ha habido gente con ciertas inclinaciones: que si ciencias, que si letras, que si a mí lo que me va es el artístico. Y luego está el grupo de muchachos que, a pesar de la edad tan mala para elegir sobre su futuro, tienen muy claro a qué (a grandes rasgos) le gustaría dedicarse. Yo estaba en el último grupo. Lo mío estaba tirado: era de letras incondicionalmente (demasiado cazurra para los números) y además me encantaban los idiomas, así que tenía más o menos claro que yo quería dedicarme a los idiomas....
from Libros y Literatura http://ift.tt/2oshKrA
via IFTTT
No hay comentarios:
Publicar un comentario